Durante estos tres años transcurridos en Italia se puede contemplar el paso que Dios va haciendo en cada Matrimonio y en cada familia, y cómo Hogares Nuevos ha sido el instrumento para que puedan remontarse más alto, para que puedan encontrarse con Cristo.
La comunidad de Consagradas “San Giovanni Paolo II” está inserta en la realidad de Italia, principalmente en Monterotondo Scalo. Y desde setiembre de este año, 2020, en Ponte Sfondato, ambos lugares pertenecientes a la Diócesis de Poggio Mirteto. La primera es una localidad habitada por muchas familias que vienen del interior por motivos laborales a Roma. Son familias que en su mayoría durante todo el día se encuentran fuera de casa, dejan a sus hijos en en las escuelas maternas ya que no cuentan con familiares cercanos y llevan un ritmo de vida lleno de actividades y de estrés. Al conocer esta realidad, se pudo palpar que hay mucha necesidad en las familias de ser acompañadas. Por lo que el primer año, sintiendo profundamente la invitación de Jesús “Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación” (Mc 16,15), junto a esta invitación de proclamar la Buena Nueva sobre el matrimonio y la familia, se pudo dar inicio a un profundo trabajo misionero a través de diversos “ven y veras” para presentarles a los Matrimonios el carisma, la espiritualidad y la riqueza de Hogares Nuevos.
Por otra parte, se buscó tener contacto con las familias a través de los diversos ámbitos donde las Misioneras de la Familia se han insertado. Uno de ellos fue la Escuela Materna, donde se le dio acompañamiento espiritual a niños de 3 a 6 años, buscando generar una cercanía y una amistad con los padres de los niños e ir conociendo la situación familiar de cada uno de ellos.
Otro espacio de misión y oportunidad para encontrarse con las familias es la parroquia, en ella se dio acompañamiento a los diversos grupos. Estos son catecismo, oratorio, grupo Scout, grupo de monaguillos, cáritas, grupo de familias y grupo de oración.
Cabe resaltar la riqueza y la gran importancia que ha generado el acercarse a los matrimonios que participan de la Eucaristía. Después de cada Celebración, se busca tener un contacto directo con los matrimonios, se les habla de Hogares Nuevos y concretamente se les hace la invitación para participar del Encuentro de Matrimonios, hablándoles de un regalo de un fin de semana que se tiene para ellos como Matrimonio. Esta invitación de persona a persona ha dado muchos frutos, generando la oportunidad de llegar a tantas familias que no llevan algún acompañamiento espiritual o que no son muy cercanas a la Iglesia, pero que tienen tanta necesidad de ser escuchadas y acompañadas. Esta tarea, también se la está comenzando a realizar en Ponte Sfondato y otras parroquias vecinas. Aunque este trabajo es reciente, se ha experimentado una gran acogida.
Contando siempre con la ayuda del Señor, después de un camino y un profundo trabajo misionero de tocar puertas y no dejar oportunidad para tener contacto con algún matrimonio y familia, se tuvo la oportunidad de que el fin de semana del 17 y 18 de noviembre del 2018 se realizara el 1º Encuentro de Matrimonios de la Diócesis Sabina Poggio Mirteto. Simultáneamente se tuvo la gracia de realizar una “Convivencia de Hijos” de los matrimonios participantes del Encuentro de Matrimonios anteriores. Se dio inicio así el acompañamiento a los Hijos de Hogares Nuevos. Se contó con la presencia de nuestro Fundador, P. Ricardo Facci, Hna. Mariana y un grupo de matrimonios animadores que generosamente conformaron el equipo, procedentes de Argentina, Costa Rica, Ecuador, España y de la arquidiócesis de Milán (Italia). Así como también se contó para la Convivencia de Hijos, con la ayuda de Hijos de Hogares Nuevos procedentes de México y Guatemala.
Como fruto de este primer Encuentro de Matrimonios se comienza a caminar junto a la primera comunidad de Matrimonios y de Hijos de Hogares Nuevos, a través del acompañamiento espiritual que Hna. Mariana da a cada uno de ellos. Así como las reuniones mensuales para trabajar la cartilla. Se puede contemplar la gran necesidad que tienen las familias y como Dios ha ido trabajando personalmente en cada uno de ellos, fruto de un encuentro personal con Cristo. Los matrimonios expresan lo importante que ha sido para ellos tener una comunidad. Muchos de ellos se sentían solos, lejos de sus familiares, pero Hogares Nuevos cambió su vida. Saber que hay alguien que camina a su lado humana y espiritualmente, caminar como comunidad de familias con los mismos ideales y valores, familias que buscan vivir con Cristo en medio. También subrayan lo importante que es para cada uno de ellos, cada mes, participar de la cartilla mensual, ya que por su ritmo de vida y de trabajo, muchas veces no se dan el tiempo para dialogar ellos dos como matrimonio, y al participar de la misma, tienen ese espacio para hacerlo, por lo que les ayuda y enriquece mucho.
Viendo la necesidad que tienen las familias de ser evangelizadas, que se les anuncie a Cristo en medio de ellas para ser familias felices, se continuó generando contacto y cercanía con más matrimonios y familias, para poder invitarlos al próximo Encuentro de Matrimonios.
El fin de semana del 6 y 7 de abril del 2019 se tuvo la gracia de realizar el 2º Encuentro de Matrimonios de la Diócesis de Sabina Poggio Mirteto, y, al mismo tiempo, se realizó simultáneamente, la Jornada de Hijos. El equipo estuvo conformado por P. Ricardo, Hna. Mariana, y Matrimonios de Argentina, Costa Rica, Ecuador y Monterotondo Scalo. También se contó con la ayuda de dos Hijos de Hogares Nuevos de España, para las actividades de la Jornada de Hijos.
El fruto de este 2º Encuentro de Matrimonios, ha sido el crecimiento y consolidación de la comunidad de matrimonios. También se puede rescatar el valioso testimonio de una hija de Hogares Nuevos, que expresa el cambio que hicieron sus papás al realizar el Encuentro de Matrimonios. En su casa pusieron un pequeño altar, y todos los días buscan un momento para poder hacer una oración en familia.
Como comunidad de familias, cada mes, animan la Santa Misa dominical por la tarde en la Parroquia, dando un servicio con los cantos, proclamando la Palabra. Ha sido un gran testimonio para las personas presentes al ver la presencia de un grupo numeroso de familias. Esto ha hecho eco en más matrimonios y familias que aún no pertenecen al Movimiento, llevándolas a expresar de la comunidad de Hogares Nuevos, de las primeras comunidades cristianas “miren como se aman”. Irradian el afecto y la alegría que hay entre ellos y que brota de un encuentro profundo con Cristo. Se puede contemplar que en la medida en que la familia acoge el Evangelio, se hace comunidad evangelizadora.
Fruto de este camino con a las familias, se ve la necesidad de acompañar también aquellas que tienen el deseo de participar del Encuentro de Matrimonios, pero por cuestiones laborales, no han podido vivir la experiencia del fin de semana del Encuentro. Se comienza así con los grupos CAC 1 y CAC 2. Se trabaja el libro del Padre Ricardo “Construyendo el amor Conyugal”, con los matrimonios que están esperando la fecha para vivir el Encuentro, con el fin de que en el tiempo de espera también se puedan sentir acompañados espiritualmente. Por otra parte, se acompaña a las parejas que aún no tienen el sacramento del matrimonio, pero se están preparando para dar el paso. Cada uno de ellos rescatan y valoran este espacio que se ha pensado para ellos, ya que les ha ayudado mucho como pareja y como matrimonio, humana y espiritualmente.
Así pues, como ha expresado P. Ricardo en algunas ocasiones, “Hogares Nuevos es un oasis en el desierto”. Verdaderamente Hogares Nuevos ha sido ese oasis en medio de tantas familias que tiene necesidad de encontrase con Cristo. Al encontrarse con Cristo, la familia está invitada a ser testimonio y reflejo del amor de Dios, se convierte en misionera. De esta forma agradecidos con Dios, los días 8, 9 y 10 de noviembre se concretó el primer Encuentro para Encuentros, teniendo como fruto los primeros matrimonios animadores de la Diócesis de Poggio Mirteto. Fue un fin de semana en el que se pudo experimentar fuertemente la presencia del Señor. El equipo animador estuvo conformado por P. Ricardo Facci, Hna. Mariana, el matrimonio Bonelli de Argentina y el matrimonio Herrera de Ecuador.
Durante el Encuentro para Encuentros se vivió un clima de alegría y disposición. Los matrimonios participantes pudieron expresar el deseo y compromiso por el trabajo evangelizador a las familias. Movilizados por la invitación de Jesús “Vayan también ustedes a trabajar a mi viña” (Mt 20,4), convirtiéndose así en familias misioneras, familias evangelizadas y evangelizadoras.
Durante los meses precedentes a marzo del 2020 cuando tendría lugar al 3º Encuentro de Matrimonios, se continúo con las diversas actividades, cartillas y reuniones con los Matrimonio e Hijos de Hogares Nuevos, así como un intenso trabajo apostólico de invitar matrimonios para el Encuentro. Después de cada actividad parroquial, continuando el contacto con los padres de los niños de la escuela materna, visitando a las familias en su Hogar, esto último dio muchos frutos. Contamos con la respuesta positiva de un buen grupo de matrimonios participantes.
El día 2 de marzo llegó P. Ricardo a la Comunidad de Consagradas para dar inicio a las diversas actividades en Europa, comenzando por el Encuentro de Matrimonios en Italia. Pero la situación del Covid-19 comenzaba a agravarse en este país, por lo que, en conjunto con los matrimonios animadores de Monterotondo Scalo, se tomó la decisión de posponer el Encuentro para noviembre. Al mismo tiempo llegó el comunicado del obispo de que se suspendían las actividades en la Diócesis por el mismo motivo. Siendo una decisión muy difícil, se dejó todo en manos de Dios. Al mismo tiempo, se buscó mantener el contacto con los matrimonios que habían confirmado, motivándolos para el próximo Encuentro de Matrimonios.
Para anunciar a Cristo a las familias, no existen límites ni fronteras.
Durante el periodo de confinamiento por motivos de covid-19, se ha podido experimentar fuertemente la necesidad de hacer algo por las familias, sabiendo que para la evangelización no hay límites, ni tiempo que esperar para anunciar a Cristo a las familias. De manera especial, en este período de pandemia ha sido muy difícil para cada familia mantener el equilibrio en todos aspectos. Por lo que, a partir del 12 de marzo hasta ahora, con la gracia de Dios fuimos la primer Comunidad en acompañar a las Familias de Hogares Nuevos, así como a los grupos CAC 1 Y CAC 2 a través de Video Conferencia. Buscando crear momentos profundos de oración delante del Sagrario, compartiéndoles a la distancia la presencia de Jesús Eucaristía en el tabernáculo. También el rezo del rosario con padres e hijos que fue muy profundo y emocionante. Se realizó cada cartilla mensual. Por otra parte, viendo la necesidad que tienen los Hijos de Hogares Nuevos, se buscó tener un espacio de oración y reflexión, dividiéndolos en tres grupos de acuerdo a su respectiva edad. Contando con la presencia de dos Hijos de España y uno de México en cada conexión.
La primera cartilla en realizarse fue la del mes de marzo “Ser las piernas y los brazos de Cristo”. Realmente el tema de la cartilla fue muy providencial para todo lo que se estaba viviendo en esos días. Un Matrimonio resaltó la importancia del trabajo evangelizador que hace Hogares Nuevos, “después de todo lo que se está viviendo, muchos matrimonios y familias van a necesitar de nuestros brazos y nuestras piernas para acompañarlos y anunciarles la Buena Nueva sobre el Matrimonio y la Familia”. Recalcaba la importancia de Hogares Nuevos, de lo que hace ahora, y lo que tendrá que hacer más adelante a causa del confinamiento por el Covid- 19. Otro Matrimonio destacaba la importancia de la comunidad, que están llamados a ser “los brazos y las piernas de Cristo” con los matrimonios que tienen a su lado, así como con su esposa, su marido, desde lo concreto en su hogar. Otro matrimonio expresaba lo duro que ha sido este tiempo de cuarentena para ellos, ya que tienen que desarrollar su trabajo desde casa, pero, al mismo tiempo, tienen la exigencia de ser mamá, ser papá, esposos, cocinar, ayudar a los niños con la tarea, pero a la vez ha sido un tiempo que han aprendido y descubierto la belleza de estar juntos como familia, algo que antes por las diferentes actividades y por el trabajo era imposible. Por otro lado, otro matrimonio comentaba la importancia de la oración. En este tiempo que no podemos salir a anunciar a Cristo, podemos hacernos cercanos los unos a los otros a través de la oración.
Durante el mes de abril se tuvo la oportunidad de realizar la cartilla bis del mes de abril titulada “La corona que ataca el virus. La hora de la Iglesia doméstica”. Un matrimonio testimoniaba que esta pascua les hacía detenerse a pensar en el amor redentor de Cristo. La cartilla les ayudaba a ver las cosas diferentes, y sentían la invitación a tener esperanza en sus corazones y en su familia y así ser portadores de un mensaje de amor y de esperanza para los demás. Resaltaban una cosa positiva de este confinamiento, ahora tienen más momentos juntos, buscan momentos y espacios de oración en familia. Es un tiempo hermoso que jamás habían tenido.
Otra actividad que se realizó durante este periodo fue el rezo del Santo Rosario de una manera muy especial ya que se contó con la presencia de los Hijos de Hogares Nuevos. Cada misterio y oración fueron dirigidos por ellos. Fue un momento de oración muy profundo invitandolos a rezar también como niños ante el Señor, siempre con esa confianza y pequeñez de corazón. Los Hijos quedaron muy contentos y motivados para continuar rezando el Santo Rosario.
El mes de junio, después de unos meses de confinamiento, fue un día muy especial. Como comunidad de Matrimonios se pudo acompañar en la Celebración Eucarística el 25º Aniversario de un Matrimonio de Hogares Nuevos. Fue un testimonio muy grande para cada matrimonio y para toda la comunidad parroquial. Un día lleno de alegría por el reencuentro con los matrimonios y familias presentes, y por el acontecimiento celebrado.
Con mucho entusiasmo se organizó la cartilla del mes de julio “Fortalecer los matrimonios para que sean felices”. De manera presencial, comprometidos a respetar la distancia y las medidas necesarias de prevención. Fue un momento en el que se pudo contemplar la belleza de ser comunidad. Ver cómo Dios ha ido trabajando en cada matrimonio y cómo se ha ido afianzando una hermosa amistad entre ellos y también entre los Hijos de Hogares Nuevos. Todo esto ha sido obra de Dios, fruto de estos dos años de acompañamiento, de trabajo y evangelización con las familias de la Diócesis de Poggio Mirteto.
Al tener que trasladarse las hermanas a Ponte Sfondato, los matrimonios de Hogares Nuevos acompañaron maravillosamente todo lo que significó el traspaso. Este nuevo lugar, seguramente se convertirá en un centro de espiritualidad familiar. Las hermanas cuentan con un gran apoyo de Mons. Ernesto Mandara, Obispo de la diócesis, y del párroco de toda la zona de Montopoli, Don Deolito, sacerdote filipino.
Dejamos en manos de Jesús la Misión encomendada en esta tierra italiana y pedimos que, por intercesión de María Reina de la Familia, María Reina de nuestro Hogar, Hogares Nuevos pueda llegar a más matrimonios y familias para que puedan encontrarse con Cristo.
Fuente: Hermanas Consagradas Misioneras de la Familia. Italia.