Más de 90 jóvenes Hijos de Hogares Nuevos han dicho sí respondiendo a la llamada del Papa Francisco.
“He aquí la Sierva del Señor, hágase en mí según tu palabra” (Lc 1,38)
Los días 21 al 27 de enero de 2019, se realizó en la ciudad de Panamá, la XXXIV edición de la Jornada Mundial de la Juventud.
La Jornada Mundial de la Juventud es una iniciativa pensada por el Papa Juan Pablo II, que dedicó siempre una atención especial a los jóvenes. Tiene lugar todos los años a nivel diocesano el Domingo de Ramos, y cada dos o tres años en forma de encuentro internacional, en una ciudad escogida por el Papa.
Estos encuentros internacionales han reunido a millones de jóvenes para celebrar su fe y su pertenencia a la Iglesia y han contado siempre con la presencia del Sumo Pontífice. Como es tradición en cada Jornada Mundial de la Juventud, los peregrinos son hospedados en clubes, escuelas, casas de familias.
El Comité Organizador local recibe las inscripciones de todos los peregrinos y delega la recepción de los mismos a parroquias de la ciudad sede o de ciudades aledañas a ésta, quienes son los encargados directos de acogerlos.
En este caso, las Parroquias Nuestra Señora del Carmen y Don Bosco, recibieron a toda la delegación del Movimiento Hijos de Hogares Nuevos, donde en casas de familia, cada peregrino pudo experimentar con el correr de los días, que el Señor les regaló una familia panameña por quien rezar y a quién no se olvidará jamás.
Los Hijos de Hogares Nuevos han participado de todas las actividades organizadas durante esos días: las catequesis con los Obispos durante las mañanas en las parroquias, festivales, recitales, la Feria Vocacional, el Parque del Perdón y también en las celebraciones en que estuvo presente el Papa Francisco, de las cuales las más importantes son: la Ceremonia de Bienvenida, el Vía Crucis, la Vigilia de Adoración al Santísimo y, el último día, la Misa de Envío, en la cual se anuncia la sede de la siguiente Jornada. “He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabra” (Lc 1,38) Fue el lema que congregó a miles de jóvenes de las diferentes latitudes para celebrar la fe en torno al Vicario de Cristo.
Contemplando el Sí de María, esta Jornada Mundial de la Juventud, giró en torno a unos temas claves que se fueron desarrollando:
La revolución del Servicio: El “sí” valiente y generoso de la Virgen María, es el ejemplo que el Papa toma para explicar el significado de “salir de uno mismo” y “ponerse al servicio de los demás”. El Pontífice los invita a servir al prójimo poniéndose “en diálogo con Dios, en actitud de escucha, como lo hizo María”.
Valentía para decir Sí: Es en el “trato con Dios y en el silencio del corazón que se descubre la propia identidad y la vocación a la que el Señor llama. Lo importante es descubrir lo que el Señor espera de nosotros y ser valientes para decir sí”. Refiriéndose siempre a María, “Mujer feliz porque fue generosa con Dios que se abrió al plan que tenía para ella”, el Papa Francisco explica que “las propuestas de Dios son para hacer que nuestra vida fructifique y haga brotar muchas sonrisas y alegre muchos corazones”.
Dejen que el Señor les hable: El Santo Padre anima a los jóvenes del mundo a “entrar cada uno en su interior” y preguntarle al Señor: “¿Qué es lo que quieres de mí?. Dejen que el Señor les hable – les pide el Papa – ya verán vuestra vida transformada y colmada de alegría”.
Sobre la Juventud: “No se olviden que no son el mañana, no son el “mientras tanto”, sino el ahora de Dios. No tengan miedo, vayan adelante con esa energía renovadora y esa inquietud constante que nos ayuda y moviliza a ser más alegres y disponibles, más “testigos del Evangelio”, decía Francisco.
Sobre el Amor: ¿Qué nos mueve a encontrarnos en esta JMJ? La seguridad de saber que hemos sido amados con un amor profundo que no queremos y no podemos callar, y que nos desafía a responder de la misma manera: con amor.
Es el amor de Cristo el que nos mueve. Podremos tener todo, pero si falta la pasión del amor, faltará todo. ¡Dejemos que el Señor nos enamore! Confirmar a los jóvenes en la fe es el objetivo principal de estas jornadas, suscitando en ellos un fervor que renueve a la Iglesia, la sociedad. ¡Querido Hijo de Hogares Nuevos, dile sí al Señor y ven a peregrinar con nosotros!
La próxima cita es en Lisboa en el 2022.